"Mi peor pesadilla"

 

Me levanté sobresaltada, como todas esas veces en las que había soñado exactamente lo mismo que esta noche. Con la muerte de mi padre. En el sueño aparecíamos los dos los en el coche, yo le había pedido que por favor me llevara al centro comercial nuevo ya que me quería comprar una chaqueta porque empezaba a refrescar cada vez más y él, como con todas las veces que le pedía un favor, me dijo que si. Iba conduciendo mientras yo le hablaba sobre mi día en el instituto ya que me encantaba contarle todas las tonterías que solía hacer con mis amigas, y a él le encantaba escucharme en todo momento cuando de repente sentí un choque enorme contra nuestro coche y luego todo lo demás se volvió negro. Cuando me desperté en el hospital lo primero que ví fue a mi madre y a mi hermano sentados en unas sillas y dándome la mano, al verme despierta salieron corriendo de la habitación reclamando a un médico para que me viera y yo miré hacia abajo donde tenía toda la cintura vendada, minutos después mi madre me explicó que papa y yo habíamos sufrido un accidente y que yo me había desgarrado el abdomen pero que mi padre había muerto en el acto. Me quité lentamente la venda y al ver mi cicatriz todo se me vino encima haciendo que empezase a llorar desconsoladamente y que minutos después despertara.

Esta vez había sido, con diferencia, la más real de todas, ya que el sueño parecía real pero como siempre me pasaba intenté volver a dormirme con esa sensación horrible en el pecho. pasaron los minutos y se convirtieron en horas pero yo seguía despierta y no tenía nada de sueño.Siempre que tenía esa pesadilla volvía a dormirme a la media hora pero esta noche no conseguía conciliar el sueño, supongo que fue porque a diferencia de las demás veces, no me había levantado a ver a mi padre y por esa misma razón salí de la cama y me fui directa a su habitación para poder contarle otra vez todo aquello que había vivido dormida, y ojalá nunca me hubiera levantado.

Me dirigí al cuarto de mis padres intentando visualizarle a través de la oscuridad, pero mi padre no se encontraba en la cama, solo estaba mi madre la cual dormía en su lado izquierdo dejando el derecho completamente vacío. "Estará en el sofá" dijo una voz en mi mente, ya que mi padre solía irse de vez en cuando allí para poder dormir sin molestar a mi madre por eso me desplacé hasta el salón con la esperanza de verlo, sin embargo me encontré otra vez con un espacio vacío.

Al no verle empecé a agobiarme, me sudaban las manos, tenía escalofríos y respiraba con dificultad recordando exactamente el sueño que tuve hace unas horas, Aterrada anduve hasta posicionarme delante del espejo del baño, encendí la luz y me levanté la camiseta del pijama que llevaba puesto haciendo que se me parara el corazón al ver exactamente la misma marca en el abdomen que vi horas atrás en mi pesadilla, mi cerebro ató cabos y cuando comprendí que mi padre no se había ido pronto a trabajar sino que estaba muerto las lagrimas empezaron a caer sin parar de mis ojos y lo único en lo que pensé en ese momento fue en despertarme de la pesadilla en la que mi vida se había convertido.

LUCIA LORENZO RODIÑO 1ºDB